6 Días desde Tánger a Marrakech

Día 1: Llegada a Tánger y exploración de la ciudad

El circuito comienza en Tánger, una ciudad llena de historia, donde se encuentran el mar Mediterráneo y el océano Atlántico. Este primer día lo dedicamos a descubrir los tesoros ocultos de esta vibrante ciudad.

Qué ver en Tánger:

• La Medina de Tánger: Un laberinto de callejones lleno de vida, perfecto para explorar y descubrir la cultura local.
• El Gran Zoco: El corazón comercial de la ciudad, donde puedes encontrar productos artesanales y degustar la gastronomía local.
• Cabo Espartel: Desde este impresionante mirador, verás el punto donde el Atlántico se une con el Mediterráneo.

Termina el día con una cena tradicional marroquí, disfrutando de la vista al mar y preparándote para los días llenos de aventura que vienen.

Día 2: Tánger – Chefchaouen

El segundo día nos dirigimos hacia la pintoresca ciudad de Chefchaouen, famosa por sus calles y edificios pintados en tonos azules. Situada en las montañas del Rif, esta ciudad ofrece un ambiente tranquilo y una belleza que no tiene igual.

Lugares destacados en Chefchaouen:

• Medina Azul: Pasea por sus calles pintadas de azul y disfruta del ambiente relajado y acogedor de la ciudad.
• Plaza Uta el-Hammam: El lugar perfecto para disfrutar de un té de menta mientras observas la vida local.
• Cascada Ras El-Maa: Un pequeño pero encantador lugar para relajarse y disfrutar del sonido del agua.

Pasarás la noche en un riad tradicional, disfrutando de la serenidad de Chefchaouen.

Día 3: Chefchaouen – Fez

El tercer día te lleva a Fez, una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos y un verdadero centro cultural. La medina de Fez es la más grande del mundo árabe y un lugar donde parece que el tiempo se ha detenido.

Qué visitar en Fez:

• Medina de Fez el-Bali: Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta medina es un auténtico laberinto lleno de historia.
• Madraza Bou Inania: Un espectacular ejemplo de la arquitectura islámica tradicional.
• Curtiduría Chouara: Descubre el proceso artesanal del curtido de pieles, una de las actividades más antiguas de la ciudad.

Fez es una ciudad que te atrapará por su historia, cultura y el ambiente mágico que se respira en sus callejuelas.

Día 4: Fez – Volubilis – Meknes

El cuarto día nos lleva a las ruinas romanas de Volubilis, uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Marruecos. Estas ruinas ofrecen una fascinante visión de la vida en el antiguo Imperio Romano en el norte de África.

Después de explorar Volubilis, nos dirigimos a Meknes, otra ciudad imperial que te sorprenderá con sus murallas, puertas monumentales y su ambiente relajado.

Qué ver en Meknes:

• Bab Mansour: La puerta más grande y majestuosa de Marruecos.
• Plaza El-Hedim: Un lugar vibrante lleno de vida local y mercados.
• Palacio Real: Un imponente palacio que refleja el poder y la historia de los sultanes.

Después de un día lleno de historia y cultura, pasaremos la noche en Meknes.

Día 5: Meknes – Rabat – Casablanca

El quinto día comienza con una visita a la capital política de Marruecos, Rabat. Esta ciudad tranquila y elegante ofrece varios sitios históricos que no te puedes perder.

Qué ver en Rabat:

• Torre Hassan: Un minarete inacabado que se ha convertido en uno de los símbolos de la ciudad.
• Mausoleo de Mohammed V: El lugar de descanso final de uno de los reyes más importantes de Marruecos.
• Kasbah de los Oudayas: Un hermoso complejo fortificado con vistas al océano Atlántico.

Después de explorar Rabat, continuamos hacia Casablanca, la capital económica de Marruecos, donde podrás visitar la impresionante Mezquita Hassan II, una de las más grandes del mundo, construida sobre el mar. Terminamos el día disfrutando de la cosmopolita Casablanca.

Día 6: Casablanca – Marrakech

El último día del circuito nos lleva a la vibrante y mística Marrakech, conocida como la “Ciudad Roja”. Marrakech es famosa por su bulliciosa medina, sus exóticos jardines y su arquitectura histórica.

Lugares que debes visitar en Marrakech:

• Plaza Jemaa el-Fna: El corazón de la ciudad, llena de músicos, cuentacuentos y vendedores de comida callejera.
• Mezquita Koutoubia: El símbolo arquitectónico más importante de Marrakech.
• Palacio de la Bahía: Un palacio majestuoso que refleja la opulencia de la antigua realeza marroquí.
• Jardines Majorelle: Un oasis de paz y color creado por el diseñador Yves Saint Laurent.

Termina tu viaje con una visita a los animados zocos de Marrakech, donde podrás comprar recuerdos artesanales únicos y experimentar el vibrante ritmo de la ciudad.